“Como en ciertos mangas, las historias tratan de la vida cotidiana. Pero la ventaja de éstas es que pasan junto a donde vivimos. De todo se habla con finura, y se comprende enseguida lo que apenas se sugiere, hasta tal punto su autora domina (tan pronto) la narración del cómic.” Jean-David Morvan
Texto sacado de http://www.ponentmon.com
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Béatrice y su hijo Rémi, Fabienne y Jacky, Claire y Louis... solo seis personajes durante 166 páginas de historias corrientes y llenas de sentimiento.
La casa de enfrente (obra de Vanyda) es un relato, relatos mejor dicho, de un grupo de personas que conviven juntas en el mismo edificio; sus vidas, sus relaciones y como viven los momentos en que se encuentran.
Leyendo esta obra uno (al menos yo) no puede evitar pensar dos cosas: la primera esas situaciones en las que te encuentras con un vecino en el ascensor y ninguno sabe que decir, hasta que empiezan con lo de "Hace buen tiempo ¿verdad?" y mentalmente piensas "Vaya, gracias por hacer horribles estos breves segundos", y la segunda en la moda actual de teleseries que versan sobre esta misma temática, como Aquí no hay quien viva o mis adorables vecinos, por poner dos ejemplos bien conocidos.
En esta casa los vecinos se conocen, son amigos y se visitan en ocasiones, usando una frase de Frédéric Boilet (Mariko Parade) "¡Vaya, aquí los vecinos se conocen! Parecen amigos, charlan, se invitan, discuten... Es la clase de casa en la que la extravertida de enfrente está secretamente enamorada del distraído de la planta baja" y es cierto, eso pasa aquí aunque solo se dan cuentan los personajes implicados y el lector, el resto no lo sabe o simplemente lo sospecha.
De entre todas las historias que podemos ver en esta obra principalmente, y en mi opinión, las mejores de ellas, en el apartado de guión puesto que en el apartado del dibujo mantienen todas una gran calidad Road Movie, Agradecimientos y A la hora de irse (sin olvidar el genial interludio fluorado), donde los sobreentendidos, las miradas y los pequeños detalles hacen que toda la historia gire y la estructura de la obra tenga su propia coherencia interna.
A pesar de ser la primera obra de su autora, Vanyda, y aunque en algún momento se vea cierto "amateurismo" (aunque no creo que exista esta palabra) en general goza de una gran profesionalidad tanto gráfica como literalmente, además de una gran dosis de realismo que es lo que realmente hace que te veas inmerso en la historia.
Las relaciones entre los vecinos son los engranajes que hacen que esta obra se mueva en la dirección correcta, y volviendo a parafrasear a Frédéric Boilet en referencia a la autora (y a Kan Takahama) "¿Será que solo las mujeres se atreven a contar desde los 20 años historias que son de verdad? Quiero decir historias con gentes que son de verdad".
La editorial Ponent Mon (La espinaca de Yukiko, El caminante) continua con su introducción del estilo conocido como "nouvelle manga" con la obra de esta joven autora que estudió en las Beaux Arts de Tournai y que trabajó con Francois Duprat (L´année de dragon).
Formato: Libro Autor: Vanyda (Prefacio de Frédéric Boilet) Precio: 12´50 Euros Editorial: Ponent Mon
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